jueves, 26 de febrero de 2009

AHORA, EL RETO DEL PRESIDENTE CHAVEZ

Ya salimos del referendo de la enmienda constitucional, el presidente Chávez obtuvo un nuevo triunfo y ya anunció su candidatura para el 2013. Pero antes que suceda esto (todavía falta mucho) tiene a mi entender una gran tarea por delante, espero que se de cuenta lo más pronto posible.

La consecuencia más grave de estos 10 años de gobierno, es la de tener un país muy dividido, con mucho odio entre las partes, con un fanatismo irracional que ha afectado matrimonios y hogares, esposos separados, hermanos que no se hablan. Sinceramente esa no era Venezuela. Para que vean el alcance de este hecho, les voy a citar un ejemplo muy personal: un amigo muy cercano, antichavista hasta la médula, una vez me criticó porqué estaba escuchando música venezolana, que locura, ¿es que ahora la música de un país tiene color político?. Inclusive se ha visto afectada la figura de Simón Bolívar, ya muchas personas le han adosado el odio que le tienen al presidente. Por el otro lado, usar corbata es signo de oligarca, pensar diferente, significa ser esbirro del imperio. Tamaña idiotez.

Pero si no fuera esto suficiente, cada día crece una división entre los afectos al gobierno. Ya se ve como hay dos sectores muy diferenciados: Un grupo de dirigentes, muy cercanos a la población con un gran vocación de servicio, que en realidad creen en lo que están haciendo y que yo realmente los admiro, y por otra parte hay una oligarquía chavista, si, oligarquía, es imposible que después de 10 años de mandato no surja un grupo de individuos privilegiados, que si nos atenemos a la definición del Diccionario de la Real Academia de la Lengua, hay que llamarlo oligarquía, que se está enriqueciendo descaradamente -que conste que entre ellos mismos se han acusado, esto no es invento mío- mientras que los recursos asignados a los programas sociales, en muchos casos no está llegando a sus destinatarios.

El primer sector se está dando cuenta de esta situación, se está dando cuenta que la revolución no existe, que los mismos males que se le atribuyen a la mal llamada cuarta República se están repitiendo en la quinta. Muchos se están dando cuenta de que el socialismo no funciona. El discurso de que los malos son los que rodean al presidente, pero el no, el simplemente no sabe lo que pasa, se está agotando. Muchos no entienden, por mucha hermandad que exista, como se les da inmensos recursos a países extranjeros, y aquí en el país faltan para algunos proyectos. La aprobación de la enmienda constitucional va agravar esta división entre chavistas, cuando los futuros líderes provenientes de la base no puedan optar a unos cargos, porque unos mal llamados líderes, siguiendo el ejemplo del máximo querrán perpetuarse en el poder.

Es innegable el gran liderazgo del presidente Hugo Chávez, ha sido el líder más carismático de los últimos tiempos en Venezuela, pero, honestamente, cada día veo que con más frecuencia que el comportamiento de muchos de sus seguidores se debe más por obediencia que por liderazgo.
Mucha gente está cansada, yo me incluyo en ese grupo, de esta pelea innecesaria, de esta división entre hermanos, todos somos venezolanos, aunque algunos seamos liberales y otros partidarios de un Estado fuerte, aunque seamos católicos y otros evangélicos, judíos, musulmanes o de cualquier otra creencia, aunque seamos magallaneros y otros sean caraquistas, todos somos venezolanos. Ya basta, yo en lo personal quiero volver a la Venezuela de antes, alegre, trabajadora, con muchos defectos, pero que se podían arreglar de otra manera. En el mundo abundan ejemplos muy exitosos. Por eso digo que el gran reto que tiene el presidente Chávez es la unión. Ningún proyecto de país es viable si no hay un consenso entre los distintos grupos que conforman el país. Estamos en una nueva era, en un nuevo siglo, en el cual ya no se habla de derecha o izquierda, se habla es de tecnología, de gobiernos eficientes, de sectores productivos fuertes y competitivos. Señores, el Socialismo sólo existe en los libros, por definición es inviable, eso lo saben casi todos las naciones del planeta, si no me creen pregúntenle al profesor Emeterio Gómez, que él les puede dar razones más profundas que las que yo pueda escribir. Lo que si existe es gobiernos con conciencia social, que es muy diferente
Los ejemplos dados por los países que han logrado un éxito en el campo económico, Chile, Irlanda, Costa Rica por citar algunos arrojan unas lecciones básicas para lograr el crecimiento y desarrollo económico: apertura de los mercados, estímulo al aparato productivo privado con énfasis en las nuevas tecnologías y las industrias basadas en el conocimiento, una economía de mercado, una fuerte inversión en educación técnica, instituciones sólidas e independientes, un Estado más centrado en la distribución del ingreso que en su generación y sobre todo una estricta y transparente ejecución presupuestaria. Como ven es una receta muy pragmática, gerencial dirán muchos, en donde la lucha izquierda derecha ha desaparecido por inútil. Lo que el caso de Chile ha demostrado que lo que se requiere es un proyecto de país en el cual TODOS estén comprometidos.

Pido disculpas porque este artículo me ha salido muy largo, pero es que necesitaba desahogarme. Aunque pienso diferente al chavismo en la parte política y económica, me gusta un buen mondongo, (el de mi madre por supuesto), una empanada de carne mechada con un malta en el desayuno, una reina pepeada a las 4:00 am, un pescado frito a la orilla de la playa, le meto el dedo al trago y le doy vueltas para que el hielo se derrita, al abrir una botella de licor derramo la parte de los difuntos, me encanta escuchar música llanera cuando agarro carretera, soy un magnífico manager de tribuna, considero que no hay mejor orquesta que la Dimensión Latina ni mejor músico que Oscar D’Leon, etc., etc., etc. Como ven son más las coincidencias que las diferencias, ¿por que?, porque soy venezolano, sino pregúntele a cualquier extranjero que leyó este artículo si entendió lo anterior, sobre todo lo del dedo.

El gran reto de los próximos cuatro años debería ser volver a unir a este país, es justo y necesario. La diferencia de ideas, el debate continúo, el respeto al pensamiento de los demás, es lo que hace grande a un país. Como diría Voltaire "Yo no estoy de acuerdo con lo que usted dice, pero me pelearía para que usted pudiera decirlo”.

martes, 10 de febrero de 2009

EN REFERENCIA A LA ENMIENDA

El próximo 15 de febrero, los venezolanos votarán a favor o en contra de una enmienda constitucional que permitiría al Presidente de la República optar a la reelección cuantas veces lo quiera. Muchas han sido las opiniones de los que están a favor y muchos los que están en contra, el país se encuentra tristemente dividido en una lucha que nunca ha debido comenzar. El economista Gordon Tullock, quien por muchos años estudió el aspecto económico de la política, en  su libro “Los motivos del voto” (Espasa.Calpa,1979) advierte: “Una democracia no puede soportar la prueba de la guerra social e ideológica; puede salvar sus discrepancias de accidente pero saltará hecha pedazos si lo que se cuestiona es el  modelo de sociedad mismo sobre el que la democracia asienta”|.

A continuación quisiera compartir algunas reflexiones sobre la conveniencia o no de aprobar la enmienda. En primer lugar, el gobierno está en lo cierto cuando afirma que la aprobación de la enmienda no quiere decir que el presidente se vaya a reelegir indefinidamente, ya que esto depende de la voluntad del pueblo quien decide si se queda o se va, eso es correcto, y me parece un error de la oposición insistir en esto. Lo que realmente significaría la aprobación de la enmienda es que abriría la posibilidad de que el presidente se pueda reelegir, cosa que es tan o más grave que se reelija. La gravedad radica en que seriamos nosotros que permitiríamos esa posibilidad.

El presidente es tan humano como todos y tan político como todos los políticos, si ve abierta la posibilidad de ser reelegido, lo intentará y utilizará todos los recursos a su disposición. Lo intentará porque es la actitud normal de un político. Tullock, nos explica “… el político se abre paso al poder tras una batalla abierta con otros políticos por los votos del pueblo. Cuando lo alcanza, su conducta se dirige a la permanencia y es su voluntad orientada por ese sentimiento la que toma decisiones, nunca la del pueblo.”

Todo político que se le permita reelegirse, lo hará, ya que luchará por no perder el poder adquirido. El poder seduce, embriaga y su pérdida es dolorosa. Por lo tanto es deber del pueblo limitar la permanencia de sus dirigentes en el poder y así impedir el surgimiento de la figura del caudillo, que tanto daño le hizo al pueblo venezolano durante el siglo XIX y principios del XX.

¿Quién sería el gran perdedor con la aprobación de la enmienda?, aunque resulte contradictorio sería el mismo partido de gobierno, el triunfo del “SI” iniciaría la muerte del PSUV. Ningún partido puede sobrevivir si no se renuevan periódicamente sus autoridades, si no evoluciona con el debate ideológico, si no recibe la inyección de la pasión de la juventud. Esto es imposible si las autoridades se atornillan a unos cargos siguiendo el ejemplo de su máximo líder.

En mi memoria hay unos de esos refranes que no sabes ni cuando, ni donde, ni de quien lo escuchaste, pero que siempre lo tienes presente: “el que se mete a político es porque quiere ser presidente”.

Aunque sé que es difícil, nuestro voto debe despersonalizarse, ya que no es simplemente que un hombre determinado se pueda reelegir. Sino la cuestión es que permitamos, que nuestros dirigentes en general puedan permanecer indefinidamente en el poder. Que sea nuestra conciencia nuestra mejor consejera