miércoles, 24 de marzo de 2010

SOLICITUD DE AYUDA


Estimados amigos, compañeros, alumnos y demás conocidos y leales lectores. Hace unos años me fue diagnosticado el mal de Parkinson Juvenil (normalmente esta es un enfermedad de personas de edad avanzada, pero se da el caso de que a personas jóvenes como yo les dé. El actor Michael J. Fox le apareció a una edad más temprana que a mí). ¿Por qué uno se enferma? porque uno simplemente está vivo. En mi caso hay sospecha de que puede ser consecuencia de una operación de bocio sumergido (la tiroides se hipertrofia, se engrandece) que me realizaron hace algunos años de emergencia ya que mi vida estaba comprometida. La tiroides había crecido tanto que me estaba oprimiendo corazón y pulmones, y la tráquea estaba completamente deformada (en forma de C) sufriendo ataques de asfixia sin ser asmático. Mi vida se la debo a un médico que estaba cubriendo unas vacaciones en el servicio médico del banco y que me mandó a realizar una placa de Rx, para ver porque tenía 2 años con un tos crónica que estaba siendo tratada con jarabes. Las consecuencias que puede tener un mal diagnóstico.

La enfermedad ha evolucionado en forma continua afectando mis capacidades motrices, por lo que no me quedó más remedio que abandonar mis labores docentes y jubilarme del Banco Central de Venezuela. Deteniéndose un proceso de transformació n del Núcleo de Economistas que muchos de ustedes me manifestaron su aprobación.

El movimiento de mi cuerpo se ha dificultado a tal grado que ya casi no salgo de la casa ya que en algunas ocasiones (cada vez más numerosas) pierdo el equilibrio y me caigo, lastimándome seriamente las rodillas.


El tratamiento con fármacos cada vez es menos efectivo, motivo por el cual mi médico tratante, el neurólogo Rafael Lander aconsejó una intervención quirúrgica, el cual no cura pero corrige considerablemente los síntomas.


Esta opinión es compartida por los siguientes médicos que me vieron: el Dr. Jaime Krivoy, neurocirujano y la Dra. Marisol Gallardo, neurólogo del IVSS. Los dos últimos coincidieron en que lo mejor que podía hacer es operarme en España en el Centro de Especialidades Médicas y Quirúrgicas Barcelona Parkinson quienes son especialistas de comprobada experiencia en la estimulación cerebral profunda (nombre de la intervención y que consiste en la implantación de un marcapaso para la estimulación eléctrica de núcleos cerebrales profundos). Según conversación telefónica con médicos de la clínica, mi recuperación debe estar en el orden del 95%. (bastante bueno, no creen)

El costo de la operación está en el orden de los 64.000 euros, sin contar el valor de 3 pasajes (se necesita llevar 2 acompañantes) y los gastos de manutención por un mes que es el tiempo estipulado para la operación y posterior rehabilitació n.

El caso es que no cuento con los recursos monetarios para operarme. y es muy importante que lo haga, todavía soy una persona joven y adicionalmente recientemente me nació un hijo (2 meses de edad) que me tiene muy feliz y que con todo corazón espero poder criarlo y jugar con el)


Por lo tanto le solicito su ayuda para contactar algún organismo o fundación que me pueda ayudar. Si alguno quiere colaborar conmigo personalmente, gracias de todo corazón.

Nota: Si está interesado puede observar las características de la operación en la siguiente dirección: http://www.barcelon aparkinson. com/videos/ presentacion/


Cualquier ayuda puede ser depositada en la

cuenta de ahorros del Banco Mercantil

0105-0225-010225- 11371-6

a nombre de Narciso Guaramato Parra

C.I. 5.614.989


lunes, 15 de marzo de 2010

LA RESPONSABILIDAD SOCIAL


Cada día me sorprende más como el venezolano se está acostumbrado a aceptar como válidas premisas de escasa veracidad sobre los hechos que han marcado la historia de nuestro país y la formación de nuestra sociedad.


Amparados por la poca educación o de escasa calidad que recibe el venezolano promedio, intereses particulares pregonan muchas mentiras que al ser repetidas reiteradamente, el pueblo acepta como verdades. Por ejemplo, mencionemos algunas que gozan de mucha difusión: “el venezolano es un flojo”, esta es una descarada ofensa a los miles de ciudadanos que ya a las 4:00 am están en las calle camino a su trabajo y sobre todo a las venezolanas que no solamente trabajan para llevar el pan a su casa, sino que administran sus hogares, cuidan a sus hijos y si eso no fuera suficiente, estudian con la esperanza de poder mejorar su nivel de vida.

“La culpa la tienen las políticas neoliberales que han aplicado los gobiernos venezolanos”. Bueno, inicialmente en Venezuela nunca ha habido un gobierno de corte neoliberal. El termino que se puede traducir como nuevos liberales, identifica una corriente del pensamiento económico que principalmente recomienda la disminución del Estado a su mínima expresión y como bien lo explica el economista Maxim Ross en su libro “Capitalismo Salvaje o Estado Depredador” (Editorial Alfa,2008) los distintos gobiernos que ha tenido Venezuela se han caracterizado por favorecer el crecimiento desmedido del Estado, para muchos, dentro de la filosofía Keynesiana. Incluso Ross afirma que el problema fundamental es que nunca se aplicado el capitalismo en su real expresión.

La tercera premisa que quiero destacar y la cual es el motivo de este artículo, es la supuesta falta de conciencia social del empresario venezolano. A nivel mundial se ha llegado a un consenso que una empresa debe garantizar al consumidor la mejor calidad de bienes y servicios al más bajo precio posible, establecer las mejores relaciones de trabajo y mantener el bienestar económico para la empresa. Igualmente frente a la comunidad defender la democracia como sistema político y el régimen de la iniciativa privada, estimular y promover toda actividad cívica, social, cultural o educativa de la comunidad.

Lo primero solo es posible en un régimen de libre mercado donde compitan un buen número de empresas, tanto nacionales como extranjeras. El segundo aspecto, el cual se asocia básicamente a la responsabilidad que tiene el empresario con la sociedad, la impresión que tengo es todo lo contrario a lo que generalmente se afirma. Casos como el Dividendo Voluntario para la Comunidad, o el Hospital Ortopédico Infantil creado por iniciativa del empresario Eugenio Mendoza, me dan a entender que el empresario venezolano si tiene presente su responsabilidad social.

El excelente trabajo de la socióloga Charo Méndez Rivas: “Responsabilidad Social de Empresarios y Empresas en Venezuela durante el siglo XX” (2004) demuestra como desde el surgimiento de las primeras casa comerciales en el país, la casa Boulton y la Casa Blohom, el empresario venezolano ha intervenido activamente estimulando el desarrollo social, cultural y sanitario del venezolano. Por lo menos 108 Fundaciones, 14 Asociaciones civiles así como un número importante de institutos educativos, museos y programas de apoyos al trabajador son señalados en el texto. La autora destaca el hecho de que estas actividades han sido más efectivas cuando se llevaron a cabo en trabajo conjunto con el gobierno.

Es importante destacar que es imposible que una empresa sea exitosa si no cumple con su responsabilidad social así como es muy difícil que una empresa a la que se le imponga restricciones, limitaciones y excesivas regulaciones pueda cumplir con su responsabilidad. Sólo un sector productivo privado en continuo crecimiento podrá transferir parte de sus beneficios a sus trabajadores y a la comunidad a la cual pertenece. En contra de las afirmaciones muy politizadas, la sociedad venezolana ha tenido una importante mejora en su nivel de vida cuando la empresa privada ha gozado de libertades para su actuación y desarrollo.


domingo, 7 de marzo de 2010

CHILE

En una fría madrugada, clima desconocido donde el invierno moribundo le cede su lugar a la primavera como dos amantes fusionados en el que ninguno ha logrado el dominio. Inicié mi estadía de un mes en Santiago de Chile para asistir a un curso en el Instituto latinoamericano y del Caribe de Planificación Económica y Social (ILPES).

Todo comenzó con el frío que me helo los huesos a la salida del aeropuerto y el buscar una dirección: Manquehue con Luis Pasteur donde me esperaba la Sra. Teresa con quién por vía telefónica había convenido mi hospedaje. El recibimiento y posterior trato que me dio esta gran dama, quien desde ese momento y para siempre es cariñosamente “Meme”, hicieron que mi impresión de Santiago fuera muy especial.

El curso se iniciaba pocas horas más tarde de mi llegada, por lo que tuve que asearme y vestirme rápidamente para dirigirme al edificio sede de la ONU ubicado en la Rotonda de Vitacura. Ya que me es imposible dormir en un avión, mi primer día en Chile fue de un largo insomnio, agravado por el hecho que en esa época el ocaso se presentaba a la irracional (para mi) hora de la 9:00 pm., excusa apropiada para caminar y conocer la ciudad. Tuve la suerte que el día de mi llegada coincidió con la inauguración de la Feria Internacional del Libro de Santiago. Por lo tanto mi primer contacto no académico con la ciudad fue la visita a la estación de Mapocho donde se celebró el evento.

Desde que salí ese primer día de la casa de Meme para cumplir mis obligaciones, comenzó la pugna comparativa entre las dos Santiago: El Cerro de San Cristóbal y el Cerro el Avila; La Plaza de Armas y la Plaza Bolívar; Metro vs Metro; Mapocho y Güaire; Barrio Suecia y Las Mercedes; Palacio de la Moneda y el Palacio de Miraflores, Parque Arauco con El Sambil; Apumanque contra El CCCT; El puerto de Valparaiso y el Puerto de la Guaira; El pueblo de Los Dominicos y el pueblo del Hatillo. Etc.

Hubiera querido conocer más de la ciudad, pero la visita era de estudios y no de placer, pero lo que vi, me agradó: una ciudad ordenada y limpia donde se notaba el beneficio de un proceso de continuo crecimiento económico. Aunque es inevitable mi preferencia por Caracas, no podía negar lo evidente, en Santiago de Chile las cosas funcionan como deben ser, lo cual la hace más humana, con un mejor nivel de vida. Poe ejemplo, un día caminaba por la ciudad y al tratar de cruzar una calle me detuve para cederle el paso a un carro que se aproximaba, pero el vehículo frenó. Tardé un tiempo en comprender que el vehículo me estaba concediendo el paso. ¿Cómo es posible que un carro le ceda el paso a un peatón?, ¡claro, respetando las leyes!.

El recuerdo de este viaje fue despertado por el terrible grito de la tierra y el mar que castigó a Chile en días pasados y que me llenó de preocupación por la situación de los amigos dejados en ese país. Gracias a dios que por lo menos me pude comunicar con Meme. Me comentó que estaba bien, que solamente se produjeron algunos daños materiales en las casas de sus hijos pero que ella y los suyos estaban bien.

Estoy seguro, por lo que viví y presencie en Santiago que el pueblo chileno se va recuperar y saldrá fortalecido de esta tragedia. Sirvan estas pocas líneas como sincero apoyo y sentido homenaje a este pueblo hermano.